Las ayudas para personas dependientes constituyen un reto creciente para miles de familias
La Ley de Dependencia de 2006 nació para garantizar la atención y los recursos necesarios para que personas con necesidades especiales, debido a su edad, enfermedad o discapacidad, puedan mantener su autonomía personal y calidad de vida.
Con el progresivo envejecimiento de la población en España, cada día crece el número de familias que requieren algún tipo de adaptación del hogar o cuidados personales, y el acceso a las ayudas no siempre es tarea fácil. La complejidad de los trámites administrativos, así como el desconocimiento del procedimiento y los inevitables plazos, convierten el proceso en un obstáculo difícil de salvar. Son muchas las personas que ya reciben ayuda, pero no es menor el número de quienes esperan.
En esta tesitura, Nueva Mutua Sanitaria ha apostado por facilitar a sus asegurados los trámites de solicitud de ayudas con apoyo humano, profesional y eficiente, ofreciendo un considerable descuento sobre el coste de este servicio en el mercado. «Nuestro objetivo es que ninguna persona se sienta sola o desorientada frente a un proceso tan relevante para su bienestar y el de sus seres queridos«, afirma Teresa Cabezas, Directora de Tecnología de Salud y Bienestar de Nueva Mutua Sanitaria.
El servicio que se ofrece permite al asegurado delegar la gestión de solicitud de ayudas en personas expertas y habituadas a gestionar dicho proceso. Su función es, no solo, realizar los trámites, sino también acompañar y asesorar sobre el mejor modo de afrontar cada una de las fases de dependencia en las que se encuentra el solicitante o su familiar.
Iniciativas como esta de Nueva Mutua Sanitaria corroboran su contribución a crear un sector asegurador más humano y cercano, orientado a responder con la máxima calidad a las necesidades individuales, afirma su director comercial.






